Su nombre es Upside Down Challenge y su objetivo dar visibilidad y ayudar a superar esta terrible enfermedad: La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). Bajo esta premisa nace un reto inédito, donde Daniel Rossinés, un apasionado del deporte, de la natación de aguas abiertas y ex jugador de waterpolo, se dispone a nadar más de 400 kilómetros desde De Portbou (Girona) a Cases d’Alcanar (Tarragona).
Con fecha de inicio en el 17 de septiembre y varias etapas de entre 15-20 km diarios, el reto pretende recaudar dinero para ayudar en la investigación de la enfermedad. Todo el dinero recaudado se destinará a Tricals (World largest Network to Cure ALS), organismo europeo que compone la mayor red de centros de ELA del mundo. En concreto, todos los donativos se destinarán a la principal vía de investigación actual: EDARAVONE V ORAL, un fármaco con efecto antioxidante sobre la neurona (La FDA lo ha aprobado, pero que requiere de un ensayo más grande).
Como explican en la web, Upside Down Challenge comienza «con un partido de padel, con unos amigos, con ese compañero de batallas, de juego, ese confidente de tus errores y victorias en la pista y fuera de ella. Hasta que un día ese amigo, recibe la peor noticia del mundo, diagnóstico ELA. A partir de ahí, el padel, el juego, las risas, el sudor, las confidencias, los errores y las victorias, se congelaron. Y se convirtieron en brazadas de aguas abiertas para recaudar dinero para esta terrible enfermedad, para mi amigo. Nada volvió a ser lo mismo. Ni los meses, ni días, ni horas, ni segundos…»