En la Asociación “Badajoz Inclusivo” están de enhorabuena porque, por fin han visto cumplido un sueño que, además, beneficia a todos los ciudadanos, sin excepción. Se trata de la colocación de pictogramas en las instalaciones de las zonas infantiles de la ciudad. Un proyecto que comenzó a gestarse hace tiempo y que, según nos relata Ana Gómez Márquez, Presidenta de la asociación, desde hoy, ya es una realidad.

Se trata de una serie de pictogramas o placas visuales que posibilitarán la plena inclusión de los niños con Trastorno del Espectro Autista, en todos los parques y sus atracciones de juegos. Según expone Ana Gómez Márquez, Presidenta de “Badajoz Inclusivo”, el Ayuntamiento viene trabajando en el proyecto desde hace tiempo y siempre ha mostrado mucho interés en llevarlo a cabo. Recuerda que, además de la señalización en los pasos de peatones, también se han colocado pictogramas en los autobuses urbanos, así como en diferentes instalaciones como sucede con las de Policía Local, entre otras muchas. Actualmente, estas placas visuales ya pueden verse en los parques del río, en las inmediaciones del instituto Rodríguez Moñino o en la Plaza de los Alféreces. Desde la Asociación “Badajoz Inclusivo”, esperan que la señalización de las zonas infantiles esté terminada en el mes de marzo, para después continuar con el siguiente paso: pictografiar todas las instalaciones de la Federación Municipal de Deportes y más concretamente, dotar de una señalización completa al Polideportivo de la Granadilla y a la Piscina Climatizada de San Roque, puesto que, como refiere Ana Gómez, es ahí, en esos lugares, donde más presencia de niños hay, hoy por hoy, que acuden a realizar sus actividades. En lo personal, Ana es madre de Jesús, un pequeño con edad para jugar en los parques de una ciudad que debe incluirlo como lo que es: un niño más con el mismo derecho a jugar que el resto. Asegura que “estas placas les ayudan a relacionarse con sus iguales porque entienden mejor las formas de juego, las normas y su cumplimiento y así conseguimos que también las puedan respetar. Para nosotros, los padres y madres de estos niños, resultan muy importantes porque nos hemos encontrado con dificultades a la hora de llevar a nuestros hijos a jugar a estas zonas infantiles. Con los pictogramas se potencia la inclusión real y se hace visible esta discapacidad que tienen nuestros hijos y que, para muchos, es invisible”. Además beneficia a todos, ya que contribuye a la sensibilización y concienciación del entorno: “cuando otros niños y otras familias ven a los nuestros, aprenden a entenderlos y a incluirlos, por lo que creemos que, pese a que falta camino por recorrer, vamos por la senda correcta: la de luchar por una plena integración de nuestros niños en su ciudad y en la sociedad, en general”.