La historia está llena de maniobras que tienden al engaño. Desde el Caballo de Troya hasta la II Guerra Mundial. En esta última, el resultado final es más que conocido. Los aliados desembarcaron en Normandía después engañar a Hitler con un falso ejército de atrezzo que entró al viejo continente por las costas de Dover. A partir de aquí, el resto es historia. Pero una historia que necesita ser puesta en escena, pues no fue el único movimiento estratégico. El 23 de Agosto de 1944, las unidades españolas incluidas en los FTP (Francotiradores y Partisanos) libraron un combate por la Francia Libre en clara desventaja: 36 españoles y 4 franceses contra más de 1000 soldados alemanes. A través de movimientos rápidos, bloqueos y sin necesidad de disparar más allá que lo necesario, lograron la rendición. Cuando el general Konrad A. Nietzsche constató que su derrota fue contra un grupo de combatientes españoles sin uniforme y casi desarrapados, humillado y avergonzado, empuñó su pistola. La hazaña heroica en el cruce de La Madeleine quedó en el olvido.
En este verano atípico por el que hemos pasado y tras un confinamiento, donde libros como los de Evelyn Mesquida nos han acompañado, no hace falta ser muy perspicaz para visualizar las diversas maniobras de engaños por las que hemos pasado. Algunas políticas, otras cospiranóicas a manos de negacionistas y el resto aparentemente normales por su arraigo social. Para estas últimas, basta con haber sintonizado la radio musical o con poner en marcha la playlist ‘Éxitos de España’ de Spotify.
Que resaltemos este tipo de letras es bueno y positivo. Significa que estamos adquiriendo una visión de género y ya no nos parece tan normal o lógico hablar del tamaño del pecho de una mujer o de cómo tiene el trasero
Este año ha sido el turno para ‘La Jeepeta Remix’. La unión reguettonera de Nio García, Anuel AA y Myke Towers con Brray y Juanka se ha convertido en la más que probable canción del verano 2020. A través de su ritmo latino y aprovechando el actual éxito del español en sus diferentes vertientes y acentos, ‘La Jeepeta Remix’ ha conseguido colarnos un mensaje con continuas referencias a las drogas, al exceso de velocidad y a los estereotipos en las mujeres.
«Arrebatao’ dando vuelta’ en la jeepeta (dando vuelta’ en la jeepeta)
Conmigo una rubia, tiene grande las teta’ (grande las teta’)
Quiere que se lo meta
Arrebatao’ dando vuelta’ en la jeepeta»
Así reza el estribillo, todo un alarde imaginación, métrica y mensaje. Aquí nada es casual y, al igual que en múltiples ocasiones se han señalado a los videojuegos como generadores de conductas violentas, las canciones también deben tener su mención y responsabilidad. Sobre todo aquellas que inducen un pensamiento denigrante y cosificador hacia las mujeres. Letras como «Con una demonia que se baja a la roca, Donde sea me lo saca y se lo coloca» o «Y eso te gusta y te corre, Fumar hasta que tu mente se borre» detallan como aparentemente la sociedad no está tan avanzada como pensábamos. En cierto modo, su tarareo y viralidad refleja un pensamiento arraigado que está lejano de erradicarse. A su vez, aunque parezca contradictorio, genera una mínima esperanza. Y es que como nos señala Estefanía Rodríguez, psicóloga y responsable del Plan Motiva Badajoz, que «ahora nos demos cuenta y resaltemos este tipo de letras es bueno y positivo. Significa que estamos adquiriendo una visión de género y ya no nos parece tan normal o lógico hablar del tamaño del pecho de una mujer o de cómo tiene el trasero».
Así mismo, Estefanía va más allá y recalca que al final de todo «las canciones lo que hacen es reflejar una cultura y una sociedad». Pararnos a mirar solamente las letras de las canciones de reggaeton sería demasiado «sesgado», pues la realidad es que «cualquier programa de televisión que ponemos o mismamente la publicidad y el Instagram, transmiten un mensaje donde las mujeres estamos principalmente valoradas por nuestro físico. Se nos convierte en un reclamo erótico, sexual y del deseo».
Para la psicóloga y responsable de Motiva Badajoz, la problemática va más allá de las letras. Por ello, es partidaria de fomentar un pensamiento crítico. «Mismamente ayer, estuve hablando con una de mis alumnas sobre esta canción. Me gustó mucho porque a ella no le parecía normal lo que transmitía. Y cada vez son más los que se dan cuenta. Estamos ante una nueva generación que es fuerte y que se le enciende la bombilla ante canciones, frases o comentarios de este tipo», concluye Estefanía.
Pese a todo, sus números en YouTube alcanzan los 83 millones de visualizaciones. Mientras que, en Spotify, a finales del verano, ya superaba los 30 millones de escuchas y se colocaba en la lista de éxitos. Estamos ante una generación más preparada y una sociedad más avispada, que, sin embargo, vuelve a caer en la trampa. La esperanza ante la ‘Jeepeta Remix’ es esperar a que el consumo rápido musical haga su magia y el tiempo la desvanezca entre otras melodías. Mientras tanto, toca lidiar con la canción del verano 2020 y con una nueva intentona de maniobra para el engaño, donde un ritmo musical ha servido para poner en valor una hazaña que cayó en el olvido.
