La Fundación Dolores Bas destina cada año el 70% de los beneficios de su patrimonio a tres instituciones de la ciudad de Badajoz, las más emblemáticas en el momento en que Dolores Bas constituyó esta fundación, y que abarcaban un amplio espectro de necesidades de la época por ella vivida: las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que gestionan una residencia de ancianos en Badajoz, Plena Inclusión de Badajoz (Aprosuba 3)  y la Asociación Española Contra el Cáncer en Badajoz (AECC).

Así, en cumplimiento con lo establecido en sus estatutos hace entrega el 5 de octubre de 2020, en la sede de la Fundación, de 7.500€ a cada una de sus entidades beneficiarias, en total 22.500 euros pertenecientes a un adelanto de los beneficios del año 2020.

Con estas aportaciones económicas, las entidades beneficiarias sufragan gastos de ejecución de proyectos, personal, e instalaciones principalmente, pudiendo dar un mejor servicio y atención a sus usuarios y usuarias y a la sociedad.

Los retos de este año pasan por continuar generando beneficios destinados a proyectos sociales, así como avanzar en el desarrollo de El Rebellao, espacio arqueológico y natural que quiere dar a conocer a la sociedad y para el que ha preparado distintas actividades para variados colectivos, buscando alcanzar la accesibilidad para el disfrute de personas de distintas capacidades.